
Los jóvenes estadounidenses han encontrado una nueva manera de "divertirse": fotografiarse desnudos con el móvil y enviar mensajes con las imágenes, una tendencia conocida como "sexting" que cada vez preocupa más a los padres.
El “sexting”, un juego de palabras en inglés con los términos “sex” y “texting”, se ha convertido en una preocupación para padres y colegios a nivel internacional con la proliferación de teléfonos móviles con cámaras y sitios de redes sociales, pero esas imágenes pueden ser calificadas de pornografía infantil por la ley.
POR DIVERSIÓN O POR LIGAR?
En la mayoría de los casos esta acción no tiene una motivación fundada, sino que simplemente lo hacen "por diversión" o para "ligar" con otros adolescentes. Pero la broma puede salir cara.
El fenómeno es tan nuevo que existen incluso lagunas legales. Uno de los problemas al que se enfrentan las autoridades en determinar quién es el responsable cuando el envío del mensaje o la foto en cuestión se hace sin consentimiento del afectado.
El fenómeno es tan nuevo que existen incluso lagunas legales. Uno de los problemas al que se enfrentan las autoridades en determinar quién es el responsable cuando el envío del mensaje o la foto en cuestión se hace sin consentimiento del afectado.
La directora de la organización de Prevención de Embarazos Imprevistos entre Adolescentes, Marisa Nightingale, aseguró en una reciente entrevista que "es crucial que los padres hablen con sus hijos sobre las posibles consecuencias".
Nightingale advirtió que aunque los adolescentes sean demasiado jóvenes para pensarlo, las fotos se extienden como la pólvora y "podrían volvérseles en contra cuando pidan plaza en la Universidad o se presenten para su primer trabajo".
Algunos lo hacen por diversión, por provocación y por imitar a sus amigos, pero la experta advierte de que los jóvenes "pueden llegar a ser realmente humillados y darse cuenta de que lo que pensaban que era divertido se convierte en algo que los persigue durante años".
Nightingale advirtió que aunque los adolescentes sean demasiado jóvenes para pensarlo, las fotos se extienden como la pólvora y "podrían volvérseles en contra cuando pidan plaza en la Universidad o se presenten para su primer trabajo".
Algunos lo hacen por diversión, por provocación y por imitar a sus amigos, pero la experta advierte de que los jóvenes "pueden llegar a ser realmente humillados y darse cuenta de que lo que pensaban que era divertido se convierte en algo que los persigue durante años".
Es hora de supervisar las redes sociales ..

Fuente1:Elmundo
Fuente2:Elcomercio
No hay comentarios:
Publicar un comentario